Uno de los grandes atractivos de Metal Gear Solid Peace Walker, que aunque no pudimos probar “al completo”, a cuatro jugadores, lo vimos muy prometedor. Tras las clásicas pantallas en las que uno selecciona ser el anfitrión de la partida y el otro jugador tiene que buscarle, llegamos a la configuración del control y, lo que es más importante, de Snake. Tuvimos el suficiente tiempo como para copiar algunos de los detalles de cada una de las configuraciones.
comenzamos la partida, probando las particularidades del modo cooperativo. En principio, cada jugador va por su cuenta, pero si están lo suficientemente cerca se crea una especie de círculo amarillo que los rodea, lo que crea una “zona de cooperación” en la que los jugadores pueden compartir inventario, entregarse ítems, curarse, etc… Más allá de ello y de lo que puedas hablar con el compañero de al lado, el juego no cuenta en principio con acciones cooperativas al estilo de Army of Two, sino que a grandes rasgos lo que hacemos es luchar juntos y limpiar áreas de enemigos, protegiéndose mutuamente. Intentamos en la demo ser lo más coordinados posible, manteniéndonos cerca del compañero y disparar al lado que el otro no vigilaba, pero tuvimos que abandonar la improvisada formación para hacernos con una ametralladora apostada en una pequeña torre y desde allí disparar resguardados y con mucha más potencia de fuego a los enemigos que todavía quedaban. El cooperativo funciona muy bien, pero nos queda la curiosidad de si se implementarán acciones cooperativas, requiriendo que los dos jugadores hagan algo al mismo tiempo, o al menos que estén en el mismo lugar al mismo tiempo.
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Hace 6 años
